Las principales enfermedades periodontales son la gingivitis (inflamación con sangrado de las encías) y la periodontitis (destrucción del hueso que sostiene los diente)
El diagnóstico de estas enfermedades se realiza tras un estudio periodontal en base a un periodontograma y a una serie de radiografías. Se determina el grado de inflamación de las encías y la pérdida de hueso y se define el tratamiento a seguir.
Existen dos tipos de enfermedades periodontales:
Los síntomas más frecuentes son el enrojecimiento de la zona y el sangrado de las encías. La gingivitis es una afección reversible, pero si no es tratada adecuadamente, podría avanzar y convertirse en periodontitis.
Esta patología, a diferencia de la gingivitis, se caracteriza por la pérdida estructural del aparato de inserción. La periodontitis es el motivo principal de la caída dental en los adultos. Este trastorno no es común en los niños, pero su presencia se incrementa durante la adolescencia.